Historia General del Pueblo Dominicano Tomo I
Historia general del pueblo dominicano 239 muy importante para seguir trayectos cronológicos, puesto que su repetición en series y el logro de fechas a través de su relativa presencia nos permiten saber hasta dónde y durante qué tiempo un conjunto de personas se expandió y mantuvo sistemas similares de vida y creencias, de cultura y economía. Aunque los estilos alfareros son fundamentales, vale decir también que otros elementos, como artefactos, materias primas y manejo de ambientes son fundamentales para determinar cambios y posiciones del hombre frente a su medio, con lo que deseamos señalar que la cerámica es solo un elemento para determinar ciertas características culturales. Una alfarería que comienza, por ejemplo, en el siglo x antes de Cristo y que se repite consecutivamente y en diversos lugares y épocas por varios centenares de años permite saber qué grupos tribales de un mismo clan siguieron produciendo con sus mismas creencias y se expandieron por lugares diferentes manteniendo un sistema ideológico común. Los estilos alfareros no son solo decorativos. La alfarería tiene elementos im- portantes como son la decoración, el tipo de pasta o barro de que está hecha una vasija, el desgrasante del barro, o sea el material que se agrega para que este barro sea mejor y más sólido y liviano o pesado al ser cocido, las formas de las vasijas y su posible uso, y otros elementos que hablan de los modos de trabajo de las co- munidades y de aspectos rituales, como cuando las sepulturas, según los rangos y creencias, poseen ofrendas en las que identifican las vasijas y esta la inclusión dentro de las mismas de fetos que han sido enterrados junto a sus madres. U sos y voces taínas Desde el primer contacto de los españoles con América, ya algunas voces o palabras taínas pasaron a formar parte de su lengua. Hamaca fue la primera de ellas. Numerosos lugares de las Antillas y de la isla de Santo Domingo tie- nen nombres de lengua arawaca. Yuma, Yuna , Jarabacoa , Macorís , Haina , Ocoa y muchos otros más se pueden considerar relictos de lenguas del pasado. Asimismo hoy usamos denominaciones que provienen del pasado precolom- bino: bibijagua , cigua , ciguato , búcaro , jícara , guácara , carey , cocuyo , comején , jején , jicotea , jutía , iguana , jaiba , tiburón , huracán , canoa , ají , amacei , batata , yuca , mamei , bejuco , ausubo , bija , caimoní , caoba , capá , ceiba , cuaba , guanábana , guayacán , jicaco , jenequén , jobo , maíz , maní , tabaco y otras.
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