Historia General del Pueblo Dominicano Tomo I
Introducción: propósitos y perspectivas 36 sino que dependen de los avances de elaboraciones historiográficas, patrones culturales y determinantes histórico-sociales en cada época. Se subraya así que la Historia general del pueblo dominicano es la de historiadores y otros especialistas de los umbrales del siglo xxi . Pero se añade que el diseño de los contenidos propuestos en tomos y capítulos no necesariamente cumple con todas las posibles expectativas de los especialistas. Para hacer viable el propósito de una colección de este género resultaba inevitable escoger temas de acuerdo a parámetros operativos, entre ellos el propio contexto de lo que se conoce hasta hoy, aunque también lo que los autores subjetivamente consi- deran importante. En tal tesitura, los productos que se han logrado en los seis tomos están conectados con desarrollos historiográficos previos. Para fines prácticos, es de desear que los autores relacionen los contenidos particulares que les corresponden abordar con dinámicas generales, de manera que se evite una colección de textos superpuestos y sin conexión entre sí. Lo anterior requiere aclarar que no se aspira a abarcarlo «todo». La aproximación de totalidad radica en la recuperación de aspectos que permitan explicaciones globales en el transcurso del tiempo. La trama expositiva pro- puesta coincide en diversas dimensiones con el diseño de la historia social. Implica, por una parte, el acercamiento a la acción humana en torno a planos «analíticos», que suponen que la realidad única se descompone, para fines expositivos y de conocimiento, en áreas deslindadas. A partir de ellas se pueden descomponer campos particulares, sobre la base del presupuesto del carácter abierto de la realidad al conocimiento, en función de intereses y principios metodológicos variables según épocas. El fundamento de tal pers- pectiva no puede ser otro que la existencia de una dimensión objetiva de la realidad, aunque sujeta en el proceso cognitivo a los sesgos cambiantes que dependen de influencias derivadas de corrientes dentro de la colectividad en cada etapa histórica. Pero lo más importante no es tanto que se identifiquen componentes significativos, sino que se establezcan conexiones entre ellos; no se trata, pues, de recopilar informaciones por separado, sino de establecer el alcance de las interrelaciones dentro de la realidad global. Con independencia de las respuestas que puedan ofrecerse para cada situación sujeta a análisis, y sin formulaciones predeterminadas en los desarrollos de los capítulos, cabe as- pirar al logro de interrelaciones entre las partes, sean temporales o temáticas, que propendan a conceptos integrados. Por consiguiente, aunque la categoría de totalidad constituya un desidera- tum , coadyuva a identificar áreas significativas de la realidad, así como a de- sarrollar interpretaciones que no se circunscriban a planos puntuales y tengan
RkJQdWJsaXNoZXIy MzI0Njc3