Historia General del Pueblo Dominicano Tomo I

Historia general del pueblo dominicano 385 Sabe V. M. como agua y tierra no cuestan nada para el ingenio, que se dan a cualquiera que las pide. Que lo que es menester para hacer un ingenio y labrar la tierra es gente y comida. Que yo puse gente en la tierra que tengo dicho y cuatrocientos pesos que metí y con la diligencia que él puso (Diego de Morales) y comida que tenía y gente se acabo el ingenio a muy poca costa en tanto que casi no gastó nada en dinero. 40 El incremento del costo de la inversión requerida para construir un inge- nio estuvo ligado a la ampliación y desarrollo de las unidades productivas, pues muchos hacendados se embarcaron en construir obras considerables. Por ejemplo, hacia finales de la década de los años veinte el rico mercader cas- tellano Benito de Astorga había construido una presa de unos sesenta metros de largo, una de las mayores fabricadas hasta entonces. El ingenio se inició hacia 1525 en los alrededores del río Isabela, en las proximidades de la ciudad de Santo Domingo, y tomó siete años completar su construcción. 41 Según las fuentes consultadas, en la fábrica del ingenio gastó unos 12,000 castellanos y tardó dos años en levantarlo. La suma de dinero invertida se debió fundamentalmente a que en la edificación de la presa se cometieron muchos errores técnicos, y hubo que reconstruirla en varias oca- siones. El tesorero Esteban de Pasamonte también dijo haber construido una represa en la que había gastado mucho dinero. 42 Otro propietario que informó haber gastado sumas elevadas fue el teso- rero Diego Caballero. Según él, en la construcción del ingenio “San Cristóbal”, ubicado a orillas del río Nigua, invirtió unos 15,000 ducados. Esta cantidad incluía la construcción de más de 60 casas de piedra que tenía en el ingenio, además de grandes extensiones de tierra sembrada de todo tipo de productos agrícolas para la alimentación de los esclavos. 43 Hacia la segunda mitad del siglo xvi , el licenciado Estévez, oidor de la Audiencia de Santo Domingo, dijo haber construido una casa de piedra para su ingenio de más de 100 metros de largo por 10 de ancho, utilizada para guardar los azúcares. Igualmente hizo construir otro edificio donde vivían los negros y un molino que tenía 60 metros de largo por 15 de ancho, todo fabricado de piedra. Aunque no señala el monto del capital invertido en las obras, es de suponer que fue alto debido a que para esa fecha los costos se habían elevado de manera considerable. 44 Las ayudas ofrecidas por el Estado incidieron de manera determinante en el abaratamiento de los gastos de inversión de los ingenios. Pese a ello, los costos fueron aumentando en la medida en que la economía azucarera se