Historia General del Pueblo Dominicano Tomo I

Historia general del pueblo dominicano 387 los casos más conocidos destaca la efímera existencia de la sociedad formada entre Gonzalo de Vellosa y los hermanos Tapia. A poco de su creación, estos últimos se quedaron con todo el ingenio. En parte, esto podía deberse a la inseguridad y la desconfianza de los in- versores en la incipiente empresa mercantil. Asimismo, los socios con menos recursos, presionados por las deudas, decidían desligarse antes de esperar los frutos de su inversión. Así, quienes se quedaban como dueños exclusivos eran los socios con más posibilidades económicas. I ngenios y trapiches : desarrollo tecnológico Las primeras definiciones que aparecen relacionadas con los términos ingenio y trapiche , las ofrecen los cronistas Las Casas y Oviedo. Ambos autores coinciden en definir como ingenios a las unidades productivas poderosas, movidas por la fuerza hidráulica; en cambio a los trapiches eran impulsados por animales. 53 La principal diferencia entre ambas unidades productivas, además de su capacidad de producción, estaba en la estructura interna del molino. Tanto los ingenios como los trapiches utilizaban el mismo sistema de engranaje, o sea, rodillos, ejes, prensas, etc. Ahora bien, las piezas de los ingenios, al ser más grandes que las utilizadas por los trapiches, necesitaban un mayor impulso, y por ello requerían de la fuerza hidráulica. En cambio, los ejes del trapiche, al ser más pequeños, podían ser movidos por caballos, yuntas de bueyes, etcétera. Sobre la construcción del primer trapiche, Las Casas sostiene que fue obra del médico extremeño Gonzalo de Vellosa, quien en 1516: alcanzó a hacer uno que llaman trapiche, que es el molino o ingenio que se trae con caballos donde las cañas se estrujan o exprimen y se le saca el zumo melifluo del que se hace el azúcar…». 54 Parece que fue el mismo Vellosa quien, después de haber construido la maquinaria del trapiche modificó la parte que movía el engranaje mecánico por uno más grande y potente. Esta hipótesis está basada en documentos de la época y en particular en una Real Cédula enviada por el monar- ca al licenciado Rodrigo de Figueroa, a la sazón juez de residencia, en la cual felicitaba al licenciado Vellosa «por haber inventado un ingenio para hacer azúcar. 55

RkJQdWJsaXNoZXIy MzI0Njc3