Historia General del Pueblo Dominicano Tomo I
Introducción: propósitos y perspectivas 40 De lo que se trata, en este caso, es de establecer relaciones entre las partes en procesos generales o nacionales y destacar el componente local. Estas variaciones locales o regionales, en lo fundamental, han tendido a am- pliarse y profundizarse con el paso del tiempo, en consonancia con la apari- ción de relaciones sociales más complejas. Esto es producto del fenómeno que relaciona el desarrollo progresivo con diferenciaciones crecientes en ciertos campos, sobre todo económicos aunque también sociales y demográficos. También se pueden observar segmentaciones en períodos previos, que deben ser detectadas al menos como referentes para la comprensión de la historia general. Se da a veces que, a partir de determinados momentos, un factor na- tural, como la orografía, puede ser el definidor de una organización regional. En casos puntuales, dado el peso de estos procesos particulares delimitados en el espacio, se ha optado por incluir capítulos que los ilustren. Cabe, pues, detectar las asociaciones entre desarrollos históricos y de- limitaciones espaciales, en la medida en que se está en capacidad de captar la emergencia de novedades. Pero, además, en términos metodológicos, se propone establecer tales vinculaciones como requisito para aterrizar la com- prensión de los procesos, en asociación con la gente ubicada en el espacio. A lgunos de los ejes temáticos En la medida en que esta colección alude a la historia del pueblo, apunta a establecer la relación del colectivo y los segmentos socio-demográficos en que ha estado dividido con los determinantes que les han dado origen. En primer término, está sugerido establecer las relaciones que han dado lugar a las facetas particulares de los procesos, con vistas a que se produzca la comprensión de la dinámica de la población y de los segmentos en que puede dividirse en cada periodo. En consecuencia, el conjunto es objeto de intelecciones «estructurales», situadas en un plano distinto al de los habitantes directamente considerados, que vendrían a quedar enmarcados en el ámbito «social». Es común que en el análisis histórico contemporáneo se parta de la categorización entre lo estructural y lo social, aunque normalmente las tentativas interpretativas combinan ambas aproximaciones. En amplios segmentos de la historiografía actual se ha superado la noción de un tipo de narración reducida a las acciones de los sujetos. 39 De la mismamanera, ha sido objeto a consideraciones críticas el tipo de abordaje «es- tructural», de puras relaciones estables y sistemáticas de variables abstractas. 40
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