Historia General del Pueblo Dominicano Tomo I

La esclavitud intensiva 484 herrados debían ser entregados a Esteban Justinián, uno de los más prósperos señores de ingenios de la Española. 44 En1528,osea,diezañosdespuésdehaberseotorgadolalicenciaalgobernador de Bresa, el rey Carlos V concedió otra licencia igualmente importante a los comerciantes alemanes Enrique Eynguer y Jerónimo Sayler. Mediante la misma, ambos se comprometieron a llevar a la isla Española y a la de Puerto Rico 4,000 esclavos, la tercera parte de los cuales tenían que ser mujeres, 45 en un plazo de 4 años. Se acordó igualmente que el precio de los mancipados no podía pasar de 55 ducados cada uno. Esta condición no se cumplía, pues en realidad los traficantes los vendían a 70 y 80 ducados —con una ganancia superior al cien por ciento—, razón por la cual los vecinos de la isla elevaron sus protestas ante el monarca. 47 Al parecer, esta licencia no fue un regalo del emperador a los germanos, sino un intercambio de favores, ya que estos se comprometieron a llevar 50 técnicos mineros para que trabajaran en la explotación de los yacimientos auríferos en las islas y en Tierra Firme. En 1530 los comerciantes Eynguer y Sayler fueron nombrados por el emperador Carlos V como gobernador y capitán general del golfo de Venezuela. 46 Según las fuentes consultadas, el número de licencias otorgadas hasta 1540 fue 5,969. La mayor cantidad se dio para las Indias, sin especificar el destino de las mismas: 2,151. Para la Española se otorgaron 2,141, a Cuba, 718, Puerto Rico recibió 583 y Jamaica 303 licencias. 48 Otro asiento muy poco conocido, aunque no por ello menos importante, fue otorgado al mercader Diego de Hurtado, vecino de la ciudad de Toledo. Tras ganar una puja por el negocio, Hurtado se comprometía a pasar esclavos negros de las islas de Cabo Verde o de Guinea a las Indias entre 1544 y 1554. La Corona cobraba el dos y medio por ciento del impuesto del almojarifazgo, y la Casa de la Contratación nueve reales y medio por cada esclavo que fuera registrado y pasara a las Indias. 49 Hasta 1551 se habían registrado 13,284 esclavos negros; aproximadamente una tercera parte eran mujeres. Los beneficiarios de dichas licencias fueron hombres de negocios, muchos de los cuales tenían haciendas en Santo Domingo. De la misma manera recibieron de éstas los mercaderes sevillanos Gaspar y Gonzalo Jorge, quienes controlaban el monopolio del comercio del azúcar en Santo Domingo. Las informaciones más precisas que hemos podido sacar de este asiento fueron las de Jerónimo de Herrera, quien llevó, en nombre de Andrés Paredes, 120 esclavos para las islas de Santo Domingo, Cuba y Puerto Rico. Igualmente Melchor de Carrión envió a Santo Domingo 47 piezas el 15 de junio de 1545. El jurado Gaspar de Torres envió dos partidas a la Española. La primera el 3 de agosto de 1545 con 300 esclavos, y la segunda con otros 300.