Historia General del Pueblo Dominicano Tomo I
Aparatos administrativos e institucionales 512 y mantenimiento de iglesias, monasterios y otras instituciones de la Iglesia católica. La venta de indulgencias, imposición que fue una de las causas de la Reforma Protestante, fue otro ingreso estatal, pues era recolectada a nombre de la Iglesia por los oficiales reales. En muchos casos de apuros financieros, la Corona española recurría a tomar préstamos a sus súbditos, que eran recolectados por el gobernador y, en ocasiones de gran penuria del fisco, no fueron reembolsados. También se gravó fuertemente el comercio y las actividades en América, de las cuales la Corona se llevaba la mayoría de los ingresos. El monopolio que mantuvo España a través del puerto de Sevilla por varios siglos dificultó la creación de fortunas entre la élite colonial. Si hubo ricos entre ellos, se debió al contrabando, a la complicidad de los funcionarios o a la dejadez e incompe- tencia de los recaudadores. No solamente eran las necesidades de pago de una creciente burocracia local y en la propia España, lo que afectaba a la isla, sino que la Corona se había embarcado en una serie de luchas y guerras en Europa, cuyos costos reque- rían cuantiosos fondos, gran parte de los cuales debían provenir de las nuevas riquezas encontradas en las Indias. Las luchas internas del Rey, sus guerras dinásticas en el norte de Europa, la ascensión de su nieto Carlos al trono de España y su conversión en Emperador del Sacro Imperio Romano, con las con- siguientes guerras contra Francia yAustria, fueron todos acontecimientos de las primeras décadas del siglo xvi , que ocasionaron en España una crisis financiera que duraría décadas. Esas guerras se agravaron con el auge del protestantismo en Alemania y el intento de Carlos V de suprimirlo. Es sabido que España no logró salir de su atraso, pese a las riquezas que le llegaban de las Indias. Sin producción local importante, todo lo que recibía se iba en la compra de mer- cancías fabricadas en el norte de Europa que se pagaban mayormente con los ingresos de las Indias. Las colonias eran, pues, importantes por su aporte de riquezas a la metrópoli, que las usaba en sus guerras dinásticas y religiosas. Como Santo Domingo aportaba poco al tesoro español, su valor disminuyó al punto que tuvo que ser sostenida por remesas de colonias más ricas. El descubrimiento de las minas de oro y la plata en México y Perú implicó que las Antillas perdieran importancia para la Corona española. Además, las islas ya habían sido saqueadas del poco oro que tenían sus ríos, pues minas no las había. Santo Domingo, Cuba y Puerto Rico se convirtieron, ya a me- diados del siglo xvi , en una carga económica para España. A finales de ese siglo empezaron a recibir el «situado» desde México, pues los ingresos locales resultaban insuficientes para el mantenimiento de la burocracia, la milicia y el clero.
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